A partir de aquí, muy mal se nos tiene que dar para no llegar a Santiago en peregrinación. Nos quedan solo 27 kilómetros hasta la tumba del Apóstol. La aldea con toda mi admiración no tiene más que silencio y prados verdes (que no es poco).
Albergue Turístico Salceda
Por si sirve de algo, quien esto escribe repitió noche en el albergue. Con eso te lo digo «tó». Estaba tan a gusto y se comía tan bien que me vi obligado. Es un complejo con habitaciones compartidas, individuales, dobles, triples y cuádruples. La litera a 13 euros y a 10 en los meses de noviembre a febrero. Cuenta con pediluvio y amplios jardines. El menú de cena, un escándalo (por 12 euros). Hay que caminar medio kilómetro más, eso sí. Merecen la pena, esos pasos de más. Albergue Turístico Salceda: en el kilómetro 75 de la Nacional 547. Teléfono: +34 981 502 767 www.albergueturisticosalceda.com. Para reservar pincha aquí: 
Albergue de Boni
Su propietario (Boni, ¿quien sino?) es muy sociable, dicharachero y peregrino experimentado. Así que si quieres entretenimiento lo tendrás. El albergue está bien diseñado con enchufes de luz individuales, duchas con hidromasaje, buenos colchones. Si es necesario puedes contratar los servicios de una fisioterapeuta para aliviar las tensiones de la peregrinación. El Albergue de Boni: en la Nacional, tras la Casa Verde. Teléfono: +34 618 965 907. elalberguedeboni.blogspot.com
Pensión Albergue Alborada
En su día (hace 200 años) fue un molino, luego ultramarinos y ahora albergue y pensión para los peregrinos que lo deseen. La restauración de 2016 fue un acierto. Tienen establecimiento acogedor para muchos años. Una alternativa más en Salceda. Teléfonos: Fijo: +34 981 502 956 Móvil: +34 620 151 209 www.alberguealboradasalceda.com. Para reservar pincha aquí:
Casa Verde
Puede que te la encuentres cerrada porque está o ha estado a la venta. En cualquier caso, no está de más saber que fue una de las tascas con más personalidad del Camino. La misma que su propietaria, Sonia. Salias de allí con un kilito de más entre el bocata y las cervezas que te tomabas y muuuucha energía para continuar los 25 km que poco más o menos quedan hasta Santiago. La decoración (atiborrada de recuerdos, camisetas, textos escritos por peregrinos) convierten el bar en un museo del Camino. Si te comportabas como es debido, igual te llevabas un recuerdo en tu credencial. Interesantísimo lugar. Casa Verde: en la Nacional. «No hay fallo» que dicen en Galicia. Una pena que de momento siga cerrado. A ver si alguien lo recupera.
Farmacia Salceda
Sirva como homenaje a todas las farmacias que alivian nuestros dolores, molestias y dificultades en el Camino. ¿Quien no ha necesitado compeed, tiritas, analgésicos, antiinflamatorios y hasta preservativos?. Después de los bares, España es el país de las farmacias. Y en el Camino, ni les cuento. Farmacia Salceda: a la salida del pueblo.
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